Romper las rutinas
diarias, fruto de su inflexibilidad, hace de quien porta TEA, genere respuestas
inapropiadas.
Si bien en los
comienzos se pensó que ellos debían vivir sometidos a rigurosas y estrictas
rutinas para lograr su funcionalidad, la experiencia nos ha ido demostrando que
debemos trabajarlos en su flexibilidad, dentro de sus Funciones Ejecutivas (FE),
para que acepten los cambios constantes, ya que las rutinas diarias que vivimos
naturalmente sufren cambios, que algunos pueden predecirse, pero otros no. Como
por ejemplo horarios de acostarnos, que haya un apagón, que haya mucho viento
etc.
Nuestros niños/as
responden con ansiedad a estos cambios de rutina, y hasta llegan a molestarse
presentando berrinches y hasta autoagresiones, al haber cambios de estimulación
sensorial, por ejemplo la oscuridad ante un apagón, o sonido ambiental muy
fuerte en un supermercado. Para no llegar
a estos momentos limites debemos trabajarlos dentro del programa
educativo individual en su flexibilidad,
al trabajar las Funciones Ejecutivas, tema tratado en este blogs en el articulo
del28 de setiembre de 2011, por medio de la anticipación. Ante cada cambio que
se presente, se usará un sistema de anticipación en base a apoyos visuales
acompañados de mensajes verbales, según el nivel de cada estudiante y/o agendas pictóricas, cuando son previstos
los cambios.
También es
conveniente proponerles actividades distintas, dentro de la rutina de trabajo,
como cambio de roles, que les es divertido y para nosotros es un medio de
comprobación, si ha comprendido lo que se le enseñó. Otra estrategia es que
invite a otro/a niño/a para compartir activamente, en lo que solía realizar
individualmente.
Estos cambios
debemos incorporándolos de a poco y es así como lograremos que acepten las
situaciones imprevistas, gracias a la neuroplasticidad de su cerebro. Por los
últimos aportes de la Neurociencia, sabemos que el cerebro no es estático, sino
que cambia su estructura, respondiendo estímulos ambientales, cognitivos y
experiencias conductuales. Y esto es lo que les permitirá con nuestro trabajo
sistemático, lograr los cambios, que al introducirlos en forma gradual, les
ayudará a cierto plazo, que sean más flexibles en el momento de los cambios
imprevistos, para que no le resulten traumáticos.
Es en esto donde
debemos focalizar nuestro trabajo al comenzar el tratamiento, en estimular para
que se accionen nuevas conexiones neuronales y se modifiquen las conductas inapropiadas, para pasar a ser en cambio
adaptativo y flexible.
Pautas para
trabajar la flexibilidad:
Demás está decir
que antes o simultáneamente se debe
haber trabajado en Atención Conjunta,
(tema desarrollado en el artículo del 26 de diciembre de 2011), Coherencia Central
(del 20 de octubre de 2011) y Destrezas del Pensamiento (de febrero de 2012)
1-
Uso
de un mismo material, para varios
trabajos, por ejemplo Cubos:
a) construcción de trenes (uno
sucediendo al otro)
b) construcción de torres (uno arriba del otro)
c) construcción de puentes etc.
d) producción e imitación de ritmos (golpeándolos contra la mesa, que
pueden ser con patrón simultáneo o asociados a su gráfico representativo (Ej: -
, --, -
-, ---, - - - , --
-, - --, etc.
e) Con juego funcional, cargar y descargar los cubos de un camión.
2-Cambiar de a poco el lugar de: el
material, de la silla de trabajo, tanto en
la terapia como en la vida diaria. Por ejemplo cambio de la taza del desayuno,
cambio de lugar en la mesa de trabajo etc.
3-Cambios de roles .Una vez dominada la
estrategia trabajada, el/la niño/a da la orden y la terapeuta lo realiza.
4-Dramatizaciones
sobre cambios:
a)
En
una maqueta, hacer desplazar a un personaje, auto, animal etc., cambiando el
camino, donde saliendo del mismo lugar, se puede llegar al mismo destino,
cambiándole recorrido.
b)
Esto
mismo llevarlo a la vida diaria, al ir al colegio, terapia, al lugar de juegos,
a casa de un familiar etc.
5- La flexibilidad
de la conducta también la pueden lograr jugando con sus pares, ya que van
aprendiendo a autorregularse, ganando flexibilidad.
6- Cuando sea
posible acompañar la flexibilidad con la anticipación, es decir lo que va a
suceder, por medio de comunicadores visuales,
sobre todo a los niños/as no verbales .Prepararemos este material gráfico, que
resultará de gran utilidad con dibujos, fotos, videos etc. El apoyo verbal
también debe contemplarse, siempre que
sea posible.
Es así como se
logra que los estudiantes no perturben su dinámica del trabajo por su
inflexibidad.
7-Participacion del
estudiante, en la elección de tareas a realizar, por medio de tarjetas. Esta
elección lo harán sentir más integrado.
8-La comprensión
por parte del niño/a al cambio, debemos trabajarlo adecuadamente, porque si no,
puede causarle mucha ansiedad. Para ello, construir historias sociales a
medida, tanto en la casa como en la escuela, la terapia y socialmente. Que se
les ira agregando sucesos a medida que se vayan necesitando, graficándolos con
fotos, pictogramas etc.
9-Con los
estudiantes de mayor funcionalidad, se puede trabajar los cambios, mediante la
formulación de un nuevo final, del cuento trabajado.
10- Autoevaluación:
reconocer dentro de sus experiencias, faltas de flexibilidad, vividas, o
identificadas dentro de relatos (historias sociales).
11-Acompañar la
anticipación, con la participación de un análisis de la causa/efecto de la
situación adversa.
Involucrar al niño/a, en mayor o menor grado a los
cambios, siendo participes al tomar algunas decisiones, variará según el nivel
de rendimiento de cada uno.
Es una buena idea
trabajarlo en forma coordinada con su hogar, escuela y terapias, para que el
resultado sea más proactivo.
Por ejemplo si su
pupitre se rompió, que cambie de lugar de trabajo con flexibilidad,
participando en la elección de un nuevo lugar, si en su casa no hay agua, ir a
bañarse a la casa de un familiar o amigo, eligiendo dónde, y así irá aceptando
el cambio, si pasar por un momento de ansiedad.
Insisto en que se
debe trabajar la flexibilidad, puesto que les ayudará a que ante los cambios
que se enfrentaran a lo largo de su
vida, no les sean traumáticos, como sería el cambio de escuela, terapeuta, o simplemente
ante la mudanza a una nueva casa.